Son muchas las personas que no saben si el aguacate es una fruta o una verdura; esto se debe a que habitualmente se consume en platillos salados como si fuera un vegetal. Pero lo cierto, es que se trata de una fruta exótica. Su gran versatilidad y su escasa dulzura le permiten adaptarse a todo tipo de sabores y enriquecer notablemente todas las recetas.
Es una muy buena opción para incluir en la dieta diaria por ser una fuente importante de ácidos grasos monoinsaturados y poliinsaturados, que son aquellos que benefician a nuestro colesterol bueno; pero eso no le convierte obligatoriamente en un vegetal.
Para acabar con las dudas, a continuación analizaremos las características básicas del aguacate:
Su corteza es gruesa y dura de color verde, cuyo tono depende de la variedad. La pulpa es aceitosa de color crema a verde amarillento, con un sabor similar a la nuez. Posee una única semilla redondeada de color café claro que normalmente, mide de 2 a 4 cm.
El peso también suele variar de acuerdo con el tamaño del aguacate, pueden pesar desde 220 gramos hasta 2 kilos, dependiendo de la variedad a la que pertenezca. Si te interesa conocer todas las características y beneficios de los aguacates, te recomendamos leer este artículo.
¿Por qué el aguacate es una fruta y no una verdura?
La mayoría de las personas, suelen diferenciar las frutas de las verduras por el sabor dulce o salado de estas; sin embargo, esta clasificación es muy simplista, y debido a ella, se genera mucha confusión sobre la categoría a la que pertenecen ciertos alimentos, como el aguacate y los pepinos.
Las características que hacen que una fruta sea conocida como tal, es que son los ovarios de la planta, por lo que, contienen las semillas de la misma, además, poseen cáscaras y pulpas. Mientras que, las verduras surgen de cualquier otra parte de la hortaliza, como de la raíz, del capullo, del tallo o de las hojas y que son aptas para el consumo humano.
Por lo tanto, el aguacate al tener una semilla, que es el hueso redondo que nos encontramos en su interior, es una fruta; y por ejemplo, una lechuga, al ser una hoja, es una verdura.
Prepáralo como más te guste
Ahora que ya sabes por qué el aguacate es una fruta y no una verdura, podrás incluirlo en la preparación de todo tipo de platos: en malteadas, con pan tostado todas las mañanas o incluso, crudo con un poco de sal y pimienta.
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